Somos humanos, no exámenes. Tenemos que estar constantemente demostrándole a la sociedad lo capaces que somos para todo. No me gusta etiquetar a la gente, para eso ya está Facebook. Créeme si te digo que como persona vales, no cuentes el físico o tu inteligencia. Es un TODO.
Todos tenemos defectos, la mayoría de ellos son inventados por nuestro subconsciente. Que si "me gustaría tener más tetas", "que horror de piernas, tengo demasiada celulitis", "hoy no me veo guapa"... ¡BASTA!. Todas esas cosas realmente no importan. Son cosas superficiales, no somos muñecos, tenemos piel, grasa, cometemos errores, no somos perfectos, pero para mi tú lo eres en este momento.
Si tan solo nos viéramos con los ojos con los que nos ven las personas que nos aprecian se nos quitarían las tonterías.
Esto no es una competición para ver quién tiene el culo mejor puesto o las tetas más grandes. Cada uno es como es, acéptalo. Cuánto antes lo entendamos y comprendamos que nuestro cuerpo es valioso y único, antes disfrutaremos realmente de la vida.
Créeme, lo se de primera mano. No hay mayor amor que el propio.

lunes, 30 de noviembre de 2015
jueves, 19 de noviembre de 2015
No soy todo lo que parezco, que mi apariencia no te engañe.
Enseño los dientes cuando en realidad solo necesito un abrazo. Saco mi humor de perros en los peores momentos, lo reconozco. Luego me calmo, agacho mis orejitas, ronroneo un poco y pido perdón. Solo soy un pequeño cachorro que logró sobrevivir en un mundo de grandes lobos.
He ido fabricando una coraza que ha resistido hasta ahora, me siento vulnerable y me aterra. Ladrillo a ladrillo he ido reconstruyendo mi autoconfiaza y mi amor propio pero puse una muralla a mis sentimientos.
Tengo seguridad en mí misma, sé que puedo lograr todo lo que me proponga con esfuerzo. Me siento cómoda conmigo misma, me quiero. Estoy orgullosa de lo que soy. Pero me siento insegura con todo lo que tenga que ver con el amor. He ido haciéndome fuerte en otros campos,pero ese lo dejé dormido y ahora vuelve a funcionar. Me asusta. Como un niño que sale a la calle por primera vez después de un largo invierno.
Estoy descubriendo partes de mí misma que ni yo sabía que existían....Benvenuti è l'amore.
domingo, 25 de octubre de 2015
Crazy in love
Me miras, te miro, me río, preguntas el por qué y no se qué contestar.
Eso nos pasa a menudo. Creo que es porque me intimidas, pero para bien. Me pone nerviosa que me mires por mucho tiempo y más si lo haces fijamente. Desde la primera vez que nos vimos pasa eso y siempre ha sido la misma sensación.
Te acaricio, me correspondes y sonrío.
Necesito tenerte cerca, muy cerca. Me siento segura cuando me abrazas.Necesito sentirte a cada minuto, es como si tuvieras un imán sobre mi.
Te beso y me sorprendo. Me besas y me miras. Suspiro.
Pasan mil cosas por mi cabeza en ese momento. Cosas que me sorprenden, que me asustan... Sí , me asustan, soy una cobarde, tengo miedo, miedo de mis propios sentimientos, de ti, de mi, de nosotros.
Y entonces llega. Me miras y lo dices.
Se me para el mundo por unos segundos y no se qué contestar aunque por dentro esté gritando la respuesta.Tengo un miedo horrible de decirlo en voz alta y no se el por qué.
Pero saco el valor y lo susurro.
¿Esa ha sido mi voz? Sí, lo fue. Entonces llegan más besos, caricias.. y el miedo vuelve de nuevo. Un miedo espantoso, algo que no puedo frenar. Y me cabreo conmigo misma, me frustro.
¿Por qué este miedo tan ilógico?
Quiero que pare, no quiero sentirme así. Mis miedos me devoran. Pero tú haces que quiera luchar contra ellos, porque se que merece la pena por tal de estar a tu lado.
Abrázame, no me dejes ir. Bésame, no dejes de hacerlo nunca. Sostén mi mano tan fuerte como puedas. Pronuncia mi nombre tantas veces como quieras.
En este momento soy totalmente tuya, amor.
Eso nos pasa a menudo. Creo que es porque me intimidas, pero para bien. Me pone nerviosa que me mires por mucho tiempo y más si lo haces fijamente. Desde la primera vez que nos vimos pasa eso y siempre ha sido la misma sensación.
Te acaricio, me correspondes y sonrío.
Necesito tenerte cerca, muy cerca. Me siento segura cuando me abrazas.Necesito sentirte a cada minuto, es como si tuvieras un imán sobre mi.
Te beso y me sorprendo. Me besas y me miras. Suspiro.
Pasan mil cosas por mi cabeza en ese momento. Cosas que me sorprenden, que me asustan... Sí , me asustan, soy una cobarde, tengo miedo, miedo de mis propios sentimientos, de ti, de mi, de nosotros.
Y entonces llega. Me miras y lo dices.
Se me para el mundo por unos segundos y no se qué contestar aunque por dentro esté gritando la respuesta.Tengo un miedo horrible de decirlo en voz alta y no se el por qué.
Pero saco el valor y lo susurro.
¿Esa ha sido mi voz? Sí, lo fue. Entonces llegan más besos, caricias.. y el miedo vuelve de nuevo. Un miedo espantoso, algo que no puedo frenar. Y me cabreo conmigo misma, me frustro.
¿Por qué este miedo tan ilógico?
Quiero que pare, no quiero sentirme así. Mis miedos me devoran. Pero tú haces que quiera luchar contra ellos, porque se que merece la pena por tal de estar a tu lado.
Abrázame, no me dejes ir. Bésame, no dejes de hacerlo nunca. Sostén mi mano tan fuerte como puedas. Pronuncia mi nombre tantas veces como quieras.
En este momento soy totalmente tuya, amor.
sábado, 21 de marzo de 2015
La amistad
La amistad, algo tan apreciado por el ser humano.
Quien tiene un amigo tiene un tesoro. En este mundo donde vagamos solos para
encontrar nuestra felicidad es muy importante tener un acompañante, el ser
humano es un ser sociable que necesita estar integrado en la sociedad,
sociabilizarse.
En los tiempos que vivimos, sin embargo, donde
abunda la desconfianza y el egoísmo, es muy difícil encontrar la verdadera
amistad. El ser humano a veces peca de ir hacia un destino por su propio
beneficio, hacer o no hacer algo simplemente porque nos aporta algo bueno y
evadimos las cosas que nos perjudican. Pero la amistad no se trata de eso. La
amistad, para mí, consiste en ayudar a otra persona sin esperar nada a cambio.
El beneficio es ver la felicidad de la otra persona al realizar algo por él,
por ejemplo cuando damos un consejo a un amigo, no lo hacemos porque nos
aportará algo bueno o malo sino por la satisfacción de saber que eso que le
hemos dicho será beneficioso para nuestro amigo. La traición es otro elemento
que el ser humano tiene presente, de nuevo guiado por el egoísmo, por la
satisfacción propia.
Por estos
motivos el ser humano aunque está rodeado de personas, le es difícil encontrar
a alguien que pueda llamar amigo. Sin embargo, no hay que perder la confianza
en que podamos encontrar a una persona que podamos considerar nuestro amigo
durante nuestro camino en la vida. Tal y como el ser humano tiene defectos como
el egoísmo, la desconfianza, la traición, etc., tiene muchas virtudes como la
solidaridad, la empatía, la confianza, etc. En cuanto a esto último, la
confianza, sólo depende de uno mismo. A veces el humano también peca de
cotilla, cuando por ejemplo escuchamos algo que alguien ha dicho, luego tenemos la necesidad de contarlo, aunque no
estemos seguros si lo que escuchamos es realmente cierto. Cuando este cotilleo
viene referido a un amigo, ahí es cuando la confianza juega un papel muy
importante. Como Sócrates bien dijo, ese cotilleo debería pasar por un triple filtro. Este consiste en
filtrar hasta tres veces lo que la otra persona
va a contar de nuestro amigo. El
primer filtro se refiere a la verdad, si lo que se cuenta es verdad. El segundo
filtro se refiere a la bondad, si lo que se va a contar es bueno. El tercer
filtro se refiere a la utilidad, si lo que se va a contar nos sirve de algo. De
este modo, concluye Sócrates, si lo que se va a contar no es cierto, ni bueno y
además no me es útil, ¿para qué querría yo saberlo?. Con esto Sócrates nos
quiso decir que no debemos perder a un amigo por un malentendido o por
comentarios sin fundamento. Pues un amigo es un bien preciado.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)